Que las grandes empresas se aprovechan de la mano de obra en los países pobres no es una novedad. Todos lo sabemos pero todos entramos en el juego del consumismo. Yo la primera y muchas veces me lo reprocho a mí misma. Quizá deberíamos de plantearnos ciertas medidas de presión, en la medida de nuestras posibilidades. Quiero decir, si estamos en contra de la no visión y no respeto por parte de China de los derechos humanos de las personas, no deberíamos de consumir los productos que ellos nos intentan vender. Si realmente somos tan pro derechos humanos deberíamos también de dejar de comprar productos de Nike, Adidas, Converse, Puma, Reebok o New Balance, porque explotan a la gente que trabaja para comer y no puede permitirse ni tan siquiera tres comidas al día. Si queremos un mundo justo, un comercio justo hay que movilizarse y no sólo decir ¡Oh, pobrecitos! cuando los vemos por la tele.
Esa situación es la que han denunciado CCOO y UGT, que con la campaña "JUEGO LIMPIO 2008" pretenden que el Comité Olímpico Internacional adopte un compromiso concreto respecto a los derechos laborales de la gente que prepara la ropa para ellos.
Es curioso cómo se contrapone la imagen de Beckan dándole una patada magistral a un balón de fútbol y la imagen de una mujer coreana, india o de cualquier otro país en esta situación cosiendo este balón para ver si consigue comer algo hoy...
Esa situación es la que han denunciado CCOO y UGT, que con la campaña "JUEGO LIMPIO 2008" pretenden que el Comité Olímpico Internacional adopte un compromiso concreto respecto a los derechos laborales de la gente que prepara la ropa para ellos.
Es curioso cómo se contrapone la imagen de Beckan dándole una patada magistral a un balón de fútbol y la imagen de una mujer coreana, india o de cualquier otro país en esta situación cosiendo este balón para ver si consigue comer algo hoy...
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