lunes, abril 10, 2006

La bola de cristal

los periodistas no tenemos una bola de cristal
Ante tal cantidad de avances tecnológicos, esos que piensan y deciden qué hacer con los medios de comunicación se confunden.

Hoy la audiencia ha cogido el mando de su vida, cambia de canal con total naturalidad y elige lo que quiere hacer: qué canal de TDT ver, lo que puede hablar en su blog, si quiere leer la prensa de Alicante, de Nueva York o de Chile; y crear sus propios contenidos en la web. Ella puede personalizar su portada en los diarios on line, comerse la publicidad o no, conocer gente que piensa igual o diferente, participar en foros, dejar comentarios... Y los van a leer. Adiós a un matasellos olvidado en el sótano de un periódico. Y sólo con dos manitas y un teclado.

Ahora se preguntan ¿hacia donde vamos?

La agencia Reuters apuesta por "facilitar el contenido, proveer de herramientas, filtrar y editar". Y yo me pregunto ¿es ése el papel del periodismo?

Yo creo que no.

Es cierto, hay que integrar al público en nuestras rutinas. En realidad siempre se ha pensado poco en lo que quiere la audiencia. Se dice que ella quiere tal cosa o tal otra, pero yo no creo que eso sea cierto. La audiencia no puede QUERER Gran Hermano, puede que sea lo único que tiene algo de emoción de lo que echan...aunque tampoco pondría la mano en el fuego por ese tipo de audiencia.

El tema está en que la audiencia de Internet no es la de televisión, ni la de prensa, ni la de radio. Se trata de un colectivo que engloba muchos más aspectos, gente muy diferente que busca cosas muy distintas, pero a la que une la ACTIVIDAD. Es un "no me quiero quedar como un pasmarote delante de la TV". Aprovechan su tiempo en informarse de lo que quieren, porque sólo tienen que hacer un clic y están donde desean.

Hasta ahí creo que la mayoría estará deacuerdo conmigo, ahora viene lo difícil. ¿Cómo integrar este tipo de audiencia en los medios de comunicación? O debería decir ¿cómo nos amoldamos los medios a las nuevas exigencias de la audiencia?

Creo que se trata de una e-volución. Tenemos que dedicarle tiempo a lo que quiere la audiencia, que es INTERACTUAR, en líneas generales. Y eso se lo podemos dar, pero hay que diferenciar: el papel del periodismo no debe ser limitar a la audiencia en la edición de textos. El papel de la audiencia no debe ser escribir los textos que olvida el periodista.

El profesional de la comunicación está degradado en este sentido: demasiadas horas delante de un ordenador, demasiado lejos de la familia, de los amigos, demasiadas presiones...Si piensa en esto, lo hace mal. No debería de olvidarse de nada, pero se olvida por razones obvias. Yo creo que esto redunda una vez más en la situación laboral del periodista que es, en general, malísima.

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